Las
emociones… lo cotidiano y lo profundo.
“Como agua para chocolate” es una agridulce
comedia de amores y desencuentros, cada una de las recetas
de la cocina que elabora la protagonista señalan
el paso de las estaciones de su vida, siempre marcada
por los paradigmas de su madre y por la presente ausencia
de su amor
Aquí algunos párrafos donde se combinan
vivencias y recetas, sabores y emociones…que cual
espejo podemos ver reflejado lo cotidiano y lo profundo….

“…Tita era tan sensible que desde que estaba
en el vientre de mi bisabuela lloraba y lloraba cuando ésta
picaba cebolla, su llanto era tan fuerte que Nacha, la
cocinera de la casa, que era medio sorda, lo escuchaba
sin esforzarse
… Tita arribo a este mundo prematuramente, sobre la mesa
de la cocina, entre los olores de una sopa de fideos
que estaba cocinando, los del tomillo, el laurel, el
cilantro, el de la leche hervida, el de los ajos y, por
supuesto, el de la cebolla.
…
Tita se mudó de la cocina y entre atoles y tes
creció de lo más sana y rozagante. Es de
explicarse entonces el que se le haya desarrollado un
sexto sentido en todo a lo que a comida se refiere. Por
ejemplo, sus hábitos alimenticios estaban condicionados
al horario de la cocina….
…
De igual forma confundía el gozo de vivir con
el de comer. No era fácil para una persona que
conoció la vida a través de la cocina entender
el mundo exterior. Ese gigantesco mundo que empezaba
de la puerta de la cocina hacia el interior de la casa,
porque el que colindaba con la puerta trasera de la cocina
y que daba al patio, a la huerta, a las hortalizas, sí le
pertenecía por completo, lo dominaba
…
Tita gozaba enormemente de la preparación de las
tortas ya que mientras reposa el relleno es muy agradable
gozar del olor que despide, pues los olores tienen las
características de reproducir tiempos pasados
junto con sonidos y olores nunca igualados en el presente.
A Tita le gustaba hacer una gran inhalación y
viajar junto con el humo y el olor tan peculiar que percibía
hacia los recovecos de su memoria
…María Elena le lanzó una mirada
que para Tita encerraba todos los años de represión
que habían flotado sobre la familia y dijo:
-Mas vale que le informe que si es para pedir su mano,
no lo haga. Perdería su tiempo y me haría
perder el mío. Sabes muy bien que por ser la más
chica de las mujeres a ti te corresponde cuidarme hasta
el día de mi muerte…
…
Tita bajo la cabeza y con la misma fuerza con que sus
lágrimas cayeron sobre la mesa, así cayó sobre
ella su destino. Y desde ese momento supieron ella y
la mesa que no podían modificar ni tantito la
dirección de estas fuerzas desconocidas que las
obligaban, a la una, a compartir con Tita su destino,
recibiendo sus amargas lágrimas desde el momento
que nació, y a la otra a asumir su absurda determinación”
“
Como agua para chocolate… es estar a punto de explotar
de rabia o de pasión amorosa”
Cuantas veces nos sentimos como agua para chocolate,
donde la emoción nos embarga, puede ser agradable
o desagradable, variar en intensidad y duración,
podemos expresarla con lágrimas o con gritos,
con gestos y movimientos, o inhibirla.
¿Cuál es la función
de las emociones?
Las emociones tienen múltiples funciones que
se pueden reunir en tres grupos;
Función de adaptación: por la cual las emociones ayudan al organismo
a adaptarse al ambiente cambiante y complejo, por ejemplo el miedo sirve para
protegerse de situaciones dañinas, el asco para rechazar alimentos en
mal estado, olores tóxicos, etc.
Las emociones no son malas ni buenas, solo son herramientas para la adaptación
y la supervivencia, la bondad o la maldad podrá juzgarse de acuerdo
a la efectividad con la que ayudan a la adaptación
Función de motivación: los organismos buscan experimentar emociones
placenteras y agradables y evitar emociones desagradables. Las emociones son
factores motivadores de conductas a inmediato y a largo plazo. Experimentamos
emociones agradables cuando vamos alcanzando nuestros objetivos.
Así como traen consecuencias útiles, pueden traer serios problemas
como por ejemplo cuando ante un evento desfavorable reaccionamos con ira y
furia, cuando el amor es una obsesión y el placer un vicio
Función social: las emociones tienen utilidad como señal, sirven
para comunicar los estados afectivos a los otros, por ejemplo el bebé la
utiliza de manera efectiva y contundente para comunicar sus necesidades a la
madre y al entorno
También sirve para regular las conductas de los demás, por ejemplo
si alguien se muestra airado, logrará respuestas de evitación
o de confrontación en los demás. Nos ayudan a preveer y predecir
el comportamiento de quienes nos rodean, como así también promueve
conductas socialmente útiles como la colaboración y solidaridad.
Según
Le Doux “Las emociones nos hacen
ser como somos…son una experiencia muy sujetiva”.
Nos es fácil distinguir la ira del amor y reaccionar
apropiadamente ante un abrazo o un gesto amenazante…
Todos sabemos lo que es la emoción, sabemos reconocerla
en los otros y en uno mismo.
A nivel científico las emociones son objetos elusivos,
difíciles de definir.
Un aspecto conceptual muy interesante es diferenciar:
emociones y sentimientos.
Las emociones designan reacciones afectivas fuertes,
inmediatas, de poca duración, con una clara afectación
orgánica y una respuesta conductual relativamente
estandarizada.
Los sentimientos se distinguen por reacciones afectivas
difusas, más suaves y duraderas, sin un componente
de reacción orgánica tan fuerte y sin una
reacción conductual tan evidente
Como
agua para chocolate… sabores, olores, vivencias,
emociones se entrecruzan cada día… detalles
que muchas veces se pierden con la vorágine de
la vida cotidiana, otras no se valoran, se olvidan o
se aceptan silenciosamente…nos lleva a reflexionar
sobre el vínculo de la comida con nuestra propia
vida…
Cuantas veces la comida tiene sabores diferentes con
iguales ingredientes… nos detuvimos a pensar
en esto… si volvemos al momento de la elaboración
reconocemos que no estuvimos bien de animo, preocupaciones,
emociones y pensamientos hicieron perder nuestra presencia
en la cocina
Los paradigmas, las tradiciones de fiestas y agasajos
en torno a la comida, como marcas de fuego quedan en
nosotros y nos llevan a repetirlos, a perder de vista
lo importante de vivir cada momento con espontaneidad,
a comprender que todo cambia de persona a persona,
de época en época, de región en
región y está en cada uno la oportunidad
de transformar y re-crear
Los sabores y los olores de la comida, nos traen los
recuerdos de la infancia, de situaciones vividas, que
revivimos en cada uno de ellos, trasladando a nuestra
conciencia lo que habita en nuestro inconciente
Lo cotidiano y profundo de cada momento,
llevan a observarnos que está sucediendo dentro de nosotros en el
momento presente, enfocar la atención hacia
adentro y sentir nuestra propia energia.
No,
permanecer y transcurrir no es perdurar,
no es existir, ni honrar la vida.
Hay tantas maneras de no ser,
tanta conciencia, sin saber, adormecida.
Merecer la vida no es callar y consentir
tantas injusticias repetidas.
Es una virtud, es dignidad,
y es la actitud de identidad más definida.
Eso de durar y transcurrir no nos da derecho a presumir
porque no es lo mismo que vivir honrar la vida
No, permanecer y transcurrir no siempre
quiere sugerir honrar la vida.
Hay tanta pequeña vanidad
en nuestra tonta humanidad enceguecida...
Merecer la vida
es erguirse vertical más allá del mal de
las caídas.
Es igual que darle a la verdad
y a nuestra propia libertad la bienvenida.
Eladia Blázquez
Fuente
Bibliográfica:
Esquivel, L.- Como agua para chocolate
Le Doux, J.- La influencia de las emociones
*Obra de Arte de Luis Debairo Moura "Fulgores en
el espejo" de la serie "Veladurasl".
http://www.debairosmoura.com.ar/